Mujer contemporánea

En medio de las ruinas de la humanidad, se la puede encontrar. 
Ser legendario, producto de las retorcidas exigencias de la sociedad irracional, cabello tinturado, cejas bien depiladas, pestañas postizas. Sus medidas no son perfectas, pero se las arregla con sujetadores de mucha copa y bien ajustados al igual que sus jeans. Pechos plásticos, rellenos de sustancias inhumanas. Ella era un lindo mármol que se dejó moldear de la manera más vulgar, se cree una gran pintura pero es solo un lienzo en blanco. Su prominente boca, sus hinchados labios, no sirven más que para untarse pintalabios, ignora totalmente el poder de las palabras. Su semblante ausente demuestra el poco interés que tiene por recapacitar. 
La mujer contemporánea, burda, vacía y mucho pop. 
Tú tranquilo, vete con ella... Que acá yo tranquila me quedaré, alejada de este circo de muertos y de vez en cuando abrazando tu recuerdo.